La Directiva sobre equipos de protección individual (EPI), adoptada por el Consejo Europeo en 1989, se sustituyó en abril de 2018 por un nuevo Reglamento sobre EPI (UE)2016/425, que ha sido creado para mejorar la seguridad del consumidor y garantizar una competencia justa entre las empresas que proporcionan los mejores EPI para su sector.
Los cambios introducidos en este nuevo Reglamento incluyen el paso de la protección auditiva de la categoría II a la categoría III. Esta categoría incluye exclusivamente el riesgo de que el ruido nocivo pueda tener consecuencias muy graves, como daños irreversibles para la salud. El Reglamento PPE no se aplica a las fuerzas armadas ni al mantenimiento del orden público. Los responsables de salud y seguridad, a partir de abril de 2018, también deben asegurarse de que los productos de protección auditiva utilizados por los empleados cumplen con el Reglamento sobre equipos de protección personal (EPI) (EU)2016/425. Las normas europeas tienen un alto estatus a nivel mundial por su eficacia a la hora de establecer los niveles de rendimiento y se utilizan en muchos países en los que no tienen sus propias normas de producto.
Todos los productos de protección auditiva de ACS cumplen con estas normas y cuentan con el certificado de Conformidad de la UE.
El Reglamento de Control de Ruido en el Trabajo de 2005 entró en vigor para todos los sectores industriales en Gran Bretaña el 6 de abril de 2006 y para los sectores de la música y el entretenimiento en abril de 2008. El objetivo del Reglamento sobre el ruido es garantizar que la audición de los trabajadores esté protegida contra el ruido excesivo en su lugar de trabajo, que podría causar pérdida de audición inducida por el ruido y/o tinnitus.
El nivel de presión acústica al que los empleadores deben evaluar el riesgo para la salud auditiva de los trabajadores es de 80 decibelios (A). La protección auditiva debe estar disponible si se solicita. El nivel de presión sonora, en forma de exposición media diaria o semanal, al que los empleadores deben proporcionar protección auditiva e instalar su uso obligatorio es de 85 decibelios (A). Para descubrir el tiempo de exposición con y sin protección auditiva, consulte nuestra Calculadora de Exposición Segura.
La protección auditiva debe ser adecuada y suficiente para el uso, además de estar certificada. Todos los productos certificados por ACS cumplen con la norma BS EN 352-2*. Miles de personas están expuestas a ruidos de un volumen alto en el trabajo que pueden ser un riesgo para su audición. El cumplimiento de estas normas permite proteger la audición de los trabajadores.
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